El Teatro Darymelia fue testigo en el día de ayer del pregón del tiempo de Gloria de la ciudad de Jaén. Presentado por el pregonero de 2024, Ramón Molina Navarrete, fue el pastoreño Manuel Castellano el encargado de exaltar a las cofradías de un tiempo de alegría y fiesta en el que Jaén revive tradiciones y costumbres legadas de generación en generación.
Manuel, con un pregón repleto de vivencias personales, ha sabido dar su espacio a cada una de las Cofradías y Hermandades de Gloria de Jaén, a las que calificó como “esenciales de nuestra fe. El alfa y la omega de nuestra esperanza. Principio y fin de nuestra creencia”. Así terminaba su pregón Manuel Castellano, en el que no faltó el tradicional revoloteo de banderas tan típico de su cofradía de la Divina Pastora de las Almas a la que expresó sus palabras más emocionadas: “Por ello te buscaré Madre Pastora cada año, en las esquinas de tu barrio o en los cohetes al viento y te agradeceré en nombre de todos, el camino que nos marcaste y recordaré ante tu excelsa figura los años que no han acabado aún, porque mucho me temo que fuiste Tú la que nos uniste y sigues marcando la senda a ese grupo de jóvenes a los que nos enseñaste el camino de la fe. Y te pido por ellos. Y por los hijos que nacieron de ahí”.
Finalizaron el acto las palabras del presidente de la Agrupación de Cofradías, Francisco Sierra, la segunda teniente de Alcalde, África Colomo, y el consiliario de la Agrupación, Jesús Millán. El acto del pregón finalizó con el rezo de la Salve por parte del Coro de la Hermandad del Rocío de Jaén, que también prestó sus sones al inicio de una mañana en la que fueron protagonistas las históricas y devocionales cofradías de Gloria de la capital del Santo Reino.
Fotografías: Juanfran Paredes y Producciones Carrasco