Históricamente las cofradías han ido naciendo desde el centro de las ciudades hacia los barrios periféricos. En el caso de nuestra ciudad los dos lugares que albergaban más cofradías eran el desaparecido convento de San Francisco y la Basílica menor de San Ildefonso.

En la actualidad, la Basílica menor de San Ildefonso es sede canónica de las cofradías de pasión de la Vera-Cruz, la Soledad y el Resucitado, además de las cofradías de gloria de Ntra. Sra. de la Capilla, la Divina Pastora y la Sacramental. De ahí, que el barrio de San Ildefonso sea conocido históricamente por su carácter cofrade.

No obstante, en los últimos años se está dando un hecho curioso en el mundo cofrade de nuestra ciudad. De las últimas cinco hermandades erigidas canónicamente, tres de ellas tienen sus orígenes en la misma parroquia. Nos estamos refiriendo a la Parroquia de San Eufrasio.

Enclavada en el barrio de San Félix, la Parroquia de San Eufrasio (antigua ermita de San Félix de Cantalicio), ha sido el lugar dónde han nacido y crecido las hermandades de “Piedad y Estrella”, “Santa Cena” y “Caridad y Salud”. Una Parroquia que por su reducidas dimensiones, ha visto como a lo largo de estos años los grupos cristianos con vocación de cofradía han tenido que emigrar a otros lugares para seguir realizando la labor tan bien aprendida durante los años iniciales bajo su amparo.

Una feligresía que pese a no tener a ninguna hermandad con sede canónica en su iglesia, toma como suya a la hermandad de “Piedad y Estrella” volcándose con ella durante todo el año. Feligreses comprometidos que han visto como sus grupos parroquiales de “Piedad y Estrella”, “Santa Cena” y  “Caridad y Salud” han ido creciendo poco a poco, adentrándose en los corazones de un barrio con hambre cofrade, que sin embargo, se han tenido que acostumbrar a un adiós constante.

Muchos se preguntan por qué los grupos con vocación cofrade eligen ésta Parroquia como sede, pese a los antecedentes de otras hermandades. Tal vez sea por su cercanía al centro, a lo mejor es por las ganas que hay en el barrio de albergar una hermandad, puede que sea por lo bien que le ha ido a todos los grupos que han pasado por ahí, quizá porque bajo el amparo del patrón de nuestra diócesis sea más fácil embarcarse en proyectos de nueva evangelización, … Lo único que tenemos claro es que cada uno de los grupos que han pasado por la parroquia de San Eufrasio, han hecho todo lo posible para que ésta fuese su sede canónica.

Actualmente, la Parroquia de San Eufrasio es sede del grupo parroquial de “La Lanzada”, y la Hermandad del Lavatorio también realiza en ella sus cultos. Esperemos que ésta vez sea la vencida y finalmente sea sede canónica de alguna hermandad.