Antes de meter nada, lo primero es garantizar su seguridad. Una vez concluido el largo proceso de rehabilitación de la Antigua Iglesia Conventual de San José de los Carmelitas Descalzos y Camarín de Jesús, que así se llama, el primer paso es instalar las alarmas y las cámaras de videovigilancia para detectar intrusos. Tareas que ayer comenzaron y que concluirán para el día uno de septiembre, fecha a partir de la cual quiere iniciar su amueblamiento la Insigne y Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores, que así se llama también, según informó ayer su hermano mayor, Prudencio Villar.

Con las medidas de seguridad ya operativas, lo primero será contratar un seguro y, a continuación, empezar a montar los retablos, el mobiliario y todo los enseres que necesita una iglesia de estas características – «No estamos sólo para pasear santos, como a veces se nos acusa», esgrimió el hermano mayor -, con la mente puesta en que la imagen de Jesús vuelva a su casa en Navidad como muy tarde, «un reto» que se ha marcado Villar, que espera cumplir, si no fallan los pagos.

Al día de hoy

Porque los retablos están terminados, o casi, y el mobiliario y enseres están encargados, pero no pagados. Por lo que en septiembre iniciarán una campaña de suscripción popular para recaudar de fondos.
La ayuda de la Junta de Andalucía (hasta 500.000 euros) es «para lo que cuelga de las paredes», es decir, para los tres retablos del Camarín de Jesús propiamente dicho, hechos en madera de cedro natural y con adornos de orfebrería, con las imágenes de Jesús y el cirineo en el centro y las imágenes de San Juan Bautista y la Verónica en los laterales, y un cerramiento de balaustre; así como para la decoración y el cerramiento de la Capilla de la Virgen, que es más pequeña, también en madera y orfebrería, y para la capilla lateral que se creará en el templo, dedicada al Santísimo.

El primer retablo es obra del tallista Manuel Guzmán Fernández, de los talleres Guzmán Bejarano de Sevilla, y los otros dos se han hecho en los talleres de Hijos de Salvador Hidalgo, en Jaén, y están terminados en lo que atañe a la carpintería.

La ayuda de la Junta también se destina a financiar el retablo del altar mayor, que albergará los cuadros de los doce apóstoles, restaurados por el Instituto Andaluz de Patrimonio y que la cofradía espera que regresen a Jaén a primeros de septiembre.

Pero queda por financiar el resto: bancos, mesas de altar, ambones, altares, vasos de sagrario, ciriales, vestimenta y libros litúrgicos, órgano, etcétera.

Salida y entrada

En cuanto a la salida de Nuestro Padre de Jesús en la próxima madrugada del Jueves al Viernes Santo, el hermano mayor recordó lo aprobado en su día por la cofradía. «En 2010 saldrá y se encerrará en el Camarín, su casa, adonde volverá después de 172 años y de donde nunca debió de salir», dijo ayer. Prudencio Villar ya apuntó el año pasado que del debate estaba «zanjado», que así lo decidió la junta directiva, «y un acuerdo de este tipo no se puede incumplir».

No obstante, ayer recordó que en septiembre del año que viene concluye su segundo y último mandato, por lo que serán los nuevos órganos directivos los que decidirán en el futuro, para lo que puede servir de experiencia la Semana Santa próxima, aunque está convencido de que será positiva y de que es «muy bonito que Jesús salga y regrese a su casa».

El Ayuntamiento de Jaén entregó a finales de julio a la cofradía el acta de cesión del Camarín, por 75 años. La cofradía tuvo capilla propia hasta la Desamortización de Mendizábal y volver al camarín siempre ha sido uno de los sueños de sus hermanos. El proceso no ha sido fácil y desde los primeros contactos para expropiar el inmueble a sus propietarios ha pasado más de una década.

Fuente y Foto: Ideal.