Las elecciones de la junta de gobierno de la cofradía de la Buena Muerte siguen a la espera de la decisión del Obispado, que investiga las reclamaciones de un cofrade. La votación se ha pospuesto y una de las dos candidaturas presentadas, se ha retirado.
Los más de ochocientos miembros de la Cofradía del Cristo de la Buena Muerte, Cristo descendido de la cruz y Nuestra Señora de las Angustias estaban llamados a las urnas el próximo domingo, 3 de octubre. Sin embargo, ahora, es el Obispado el que tiene la última palabra sobre la celebración de los comicios para la elección de la nueva junta de gobierno, que, por ahora, se retrasan sin una fecha definitiva debido a las reclamaciones presentadas por algunos cofrades.
[teaser]La candidatura de Rafael de Vargas se ha retirado finalmente[/teaser]Dos candidaturas se presentaban a la elección. Una de ellas, la que encabeza Manuel Rico Teba, era la promovida por la actual junta de gobierno. Por otra parte, la externa era la que lideraba Rafael de Vargas Aguilera, que presentó todos los avales correspondientes para poder tomar parte en el proceso.
Sin embargo, Manuel Rico explica que, a última hora, se detectaron una serie de problemas en las listas de cofrades de pleno derecho que existen en el colectivo y que juegan un papel determinante en las elecciones. “Son errores de forma que hay que analizar y que nosotros pusimos en conocimiento del Obispado”, asegura Rico Tebas, que, además, llama a la prudencia. “Por ahora, lo único que sabemos es que se retrasan las votaciones mientras el Obispado analiza los que ha pasado”, asegura Manuel Rico, que, no obstante, hace hincapié en que los problemas surgidos en las votaciones no son tan graves cómo pueda parecer. “Se dicen muchas cosas, como que en los censos electorales figuran personas ya fallecidas, pero nada más lejos de la realidad”, resalta. “Hay que tratar el asunto con delicadeza, porque la cuestión ya está en manos de quienes tienen la potestad de supervisarlo y, por eso, queremos llamar a la calma a los cofrades”, aclara Manuel Rico.
Mientras el Obispado estudia los detalles que rodean los comicios, el proceso electoral también sufre modificaciones de carácter interno. El pasado día 19, durante la celebración del cabildo general de la cofradía en el que debían ratificarse las candidaturas finales, la encabezada por Rafael de Vargas se retiró de la contienda electoral. De este modo, cuando se haga oficial la decisión sobre las elecciones, sólo habrá una candidatura para hacerse cargo de la nueva junta de gobierno de la cofradía de la Buena Muerte.