Todo ha sido extraordinario este 20 de junio en la Basílica Menor de San Ildefonso. Después de dos años sin ver un paso procesional, la Hermandad del Señor Resucitado ha montado el de María Santísima de la Victoria para la bendición de la primera fase de su palio, un proyecto anhelado desde hace muchos años.
Tras la celebración de la Eucaristía, el párroco y capellán de la cofradía, Pedro Ortega, bendijo la pieza de tela y malla realizada por Juan Carlos Colmenero. Un palio que dejará pasar la luz del sol del radiante Domingo de Resurrección, en el que se irán incorporando las piezas de bordado conforme la situación económica de la hermandad así lo permita, pero que ha ilusionado a sus cofrades. Todos esperan que en 2022, la Virgen de la Victoria pueda cerrar la Semana Santa por las calles de la ciudad bajo su palio