La Hermandad del Silencio ha recibido un regalo muy especial. Se trata de una reliquia de San Josemaria Escrivá de Balaguer. En concreto, la reliquia contiene sangre de San Josemaría en una lámina de cristal introducida en una teca de plata, a la que unos hermanos han costeado su relicario y que en un futuro acompañará a María Santísima Madre de Dios en su palio.
“Queremos mostrar nuestro agradecimiento sincero y profundo a la Prelatura Personal de la Santa Cruz y Opus Dei, en especial a su delegación en Granada y miembros de la misma por su confianza en nuestra Hermandad para ser la encargada de custodiar y venerar este regalo que recibe la Ciudad de Jaén. Rogamos al Santísimo Cristo de la Humildad y a María Santísima Madre de Dios por todos ellos, para que sepan transmitir la llamada a la santidad que hace San Josemaría en el trabajo, la vida familiar y resto de actividades cotidianas”, ha expresado la cofradía del Martes Santo jiennense.