La hermandad de Ntro Padre Jesús Nazareno y María Stma de los Dolores llevó a cabo en la tarde de ayer sábado, la presentación de su habitual y tradicional revista cofrade titulada “Jesús Nazareno“, la cual ha llegado este año a su trigésimo primera edición.
El acto contó con la excepcional presentación de D. Jesús Carmelo Palomo Lopera, miembro de la junta de gobierno de la cofradía y responsable de sus publicaciones. El mismo desgranó las diferentes secciones de las que se compone la citada publicación. Entre las mismas se pueden observar artículos de gran interés, actos y cultos a celebrar por la hermandad y un resumen de la vida dentro de la cofradía, entre otras secciones de igual interés.
La Real sociedad económica de amigos del país fue testigo directo de la citada presentación, a la cual estuvieron invitados tanto cofrades como personas en general que abarrotaron la sala.
Tras la mencionada presentación, la cofradía la ha puesto a disposición de todos aquellos que quieran disfrutarla de manera digital en su web oficial.
Ayer, en la puerta, se recogían firmas para la coronación de la Virgen. Soy consciente de que ésto me va a costar puntos negativos, pero sigo sin comprender ese empeño de la hermandad en coronar canónicamente a la Virgen de los Dolores cuando no cumple con todos los requisitos para ello. Reconozcamos su probada veneración sólo porque tiene más de 50 años de antigüedad, aunque en el seno de esta hermandad, la veneración la aglutina el nazareno. Pero no trago con la devoción popular ni con los favores atribuibles a la Virgen, aunque saldrán ahora cientos de testimonios. Señores de Jesús y por extensión, jienneneses: ¿quién le hace caso a la Virgen de los Dolores? Si hasta en su flamante camarín hay que buscarla, apenas un reclinatorio para orar ante ella, cuando delante de Jesús sobra sitio; cuando han tenido la oportunidad de ensalzarla, como Ella debe, situándola en un lugar más digno (quizá en el Altar Mayor). Corónenla para que su dilatada historia tenga un hito más, si eso es lo que realmente quieren. En cualquier caso, Ella no tiene culpa de ser titular en una hermandad que gira en torno al “Abuelo”, que no critico pues es su idiosincracia, pero trabajen porque la Señora de los Descalzos ocupe el lugar que se merece en la hermandad, fortalezcan la devoción y el culto a su imagen, dénle el protagonismo que se merece y entonces, cuando pasen años y los devotos vayan al camarín, no sólo se postrarán ante Jesús Nazareno, sino que su divina Madre compartirá con el hijo la devoción y el cariño de todo un pueblo. Aunque algunos dirán que, aprovechando la coronación y los privilegios que supone, canónicamente hablando, ya se fomentará el culto “a posteriori”. Tiempo hay, desde luego, para hacer las cosas bien. Ánimo y a conseguir las firmas necesarias (creo que 3.000, o más), lo demás vendrá rodado.