Cáritas Diocesana de Jaén culminó con la celebración de una Eucaristía los actos que viene realizando a favor de las “personas sin hogar”. Esta celebración tuvo lugar en el Monasterio de Santa Clara de la capital jienense y estuvo presidida por D. Juan Raya, Delegado Episcopal de Cáritas y concelebrada por D. Juan Bautista Monzón, capellán del Monasterio.
Participaron en la eucaristía numerosos miembros de Cáritas Diocesana, así como del Hogar de Santa Clara. En la homilía, el Delegado Episcopal de Cáritas comentó que la finalidad de este acto era renovar “nuestro compromiso con Dios de estar a atentos a la realidad que pasa a nuestro alrededor. Hoy renovamos con la Eucaristía nuestra actitud de estar atentos a lo que el Señor nos interpela. Y hoy de forma muy especial todas esas personas sin hogar. Tanta gente que se quedó no sólo sin techo, sino sin hogar”. D. Juan Raya también comentó durante su homilía que “hogar” es una palabra “casi sagrada, que nos habla de afecto, que nos habla de relación, que nos habla de fraternidad, de preocupación del uno por el otro, de calor humano, de cercanía”.
En los días previos a esta celebración, y dentro de la programación de la campaña de “personas sin hogar”, se llevaban a cabo otros eventos entre ellos una jornada de reflexión sobre dicha problemática. “Tuvimos la suerte de tener como invitado a una persona de gran prestigio en España sobre la problemática de los ‘sin techo’, D. Pedro Cabrera. Hemos tenido también un día de retiro, de convivencia con todos los internos de la casa. Y además, hemos publicado un manifiesto en el que hacemos constar cual es la situación actual de los sin techo en nuestro país”, comentan desde Cáritas Diocesana de Jaén su Director, D. Rafael López-Sidro.
El objetivo fundamental de todos estos actos era, según López-Sidro, dar a conocer a la sociedad la existencia de unas personas que son invisibles. El Director de Cáritas diocesana afirma que: “miramos para otro lado porque no queremos ver una realidad que es espantosa y que la están viviendo muchísimas personas en nuestro país. Aproximadamente 30.000 personas están tiradas en la calle e ignoradas por la sociedad. También se pretende sensibilizar ante este problema que lamentablemente está creciendo de un modo escandaloso”.