Como prólogo al Solemne Septenario que la la Pontificia y Real Cofradía del Santísimo Cristo Yacente y Siervos de Ntra Sra de la Soledad celebra tradicionalmente en la semana de Pasión, ayer sábado 24 de marzo tuvo lugar en horario matutino, desde las diez de la mañana hasta pasadas la una de la tarde, el entrañable Besapié al Santísimo Cristo Yacente con una constante afluencia de público.
Un acto único para contemplar y adorar al Señor sin el habitual obstáculo de la reja de su Capilla.
La imagen, que presidía la entrada de la Capilla de la Soledad, tenía desplegado como fondo un dosel morado y era escoltada por sus cuatro faroles hexagonales que labró el taller de Angulo en 1965. A Sus pies se situó un bello centro de flores y en un margen adelantado el guión de la Cofradía tras el cual se ubicó la bolsa de caridad.
Posteriormente dicha imagen pasó al Presbiterio de la Basílica Parroquial para la celebración del Solemne Septenario, el cual seguirá llevándose a cabo hasta el próximo 30 del presente mes.