“Su mañana es hoy”. Con este lema fue presentada la nueva campaña contra el hambre de la delegación jiennense de Manos Unidas. Al acto acudieron, además de la presidenta de la organización y el obispo de la Diócesis, el padre blanco Eugenio Bacaicoa, que ofreció su testimonio de misionero.

La organización no gubernamental para el desarrollo (ONGD) Manos Unidas celebró ayer, en la sede en la capital del Colegio Oficial de Farmacéuticos, la presentación “oficial” de la campaña contra el hambre. El lema de esta edición —la número 52— es “Su mañana es hoy”.

En el acto intervinieron la presidenta diocesana, Ana Colmenero; el vicepresidente de la ONGD, Cristóbal Medina; el misionero Eugenio Bacaicoa; el vicario general, José Antonio Maroto y el obispo jiennense, Ramón del Hoyo López. Además acudió más de medio centenar de personas, en su mayoría colaboradores de la organización.

Un punto muy positivo que se quiso destacar en la presentación es que la solidaridad de los jiennenses es, por ahora, inmune a la crisis. “Quiero dar las gracias a la sociedad jiennense porque responde, año tras año, a la llamada de Manos Unidas. Pese a la crisis, hemos conseguido reunir más de 550.000 euros en toda la Diócesis”, dijo Colmenero. Con este dinero se podrán financiar los 15 proyectos “asumidos” en 2010.

La delegación jiennense adelantó la presentación una semana para aprovechar la visita del padre blanco Eugenio Bacaicoa. “Quiero apoyar esta campaña no solo por el bien que Manos Unidas hace, sino por el impacto que tiene sobre ese mundo de la pobreza”, dice. “Suelo decir jocosamente que si nosotros los misioneros no estuviéramos allí, Manos Unidas tendría que ir al paro, porque nosotros conocemos la realidad y luego presentamos los proyectos”, dice. Bacaicoa estuvo ayer en Jaén, y a lo largo de los próximos días visitará diferentes municipios para animar a la participación ciudadana con su testimonio, ya que ha sido, durante muchos años, misionero en varios países africanos.

La organización trabaja, desde sus 71 delegaciones, en la sensibilización social y en la recaudación de fondos que hagan realidad un mejor futuro para millones de personas en los países del llamado tercer mundo. Para ello se programan múltiples y variadas actividades, desde teatro hasta festivales, aunque la principal es la colecta de la jornada nacional de la ONGD, cada segundo domingo de febrero.

“Somos una ONG de voluntarios católicos que trabajamos, desde hace más de 50 años, contra el hambre en el mundo”, explicó Colmenero. “El lema de este año alude a que el futuro de muchos niños está, hoy, en nuestras manos”. La lucha contra la mortalidad de los menores de 5 años es, además, uno de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, concretamente el cuarto. La presidenta diocesana de Manos Unidas declaró que en los últimos tiempos se ha avanzado mucho, al menos en este punto en concreto, pero que todavía queda mucho camino por recorrer. De hecho, según datos de la ONGD, cada minuto mueren 9 niños por causas asociadas a la desnutrición y cada hora fallecen más de 1.000 menores de 5 años por diferentes males