El pasado sábado, 21 de enero, se celebraba, en la parroquia de San Juan Bosco de Jaén, la Eucaristía con motivo de la Jornada Mundial de las Migraciones. Esta celebración, que comenzaba pasadas las siete y media de la tarde, estuvo presidida por D. Juan Francisco Rubio, párroco de San Juan Bosco, y concelebrada por D. Juan Manuel Mateos, vicario parroquial. Participaron, además, miembros del Secretariado Diocesano de Migraciones y de Cáritas Diocesana, así como personas inmigrantes y otros fieles.
Durante su homilía, Rubio hizo hincapié en la necesidad del compromiso cristiano para conseguir la paz, la fraternidad y la justicia: “El gran compromiso de la comunidad cristiana es hacer creíble la Palabra de Dios: crear un mundo nuevo donde habite la paz, la hermandad y la justicia. Y en ese contexto es donde nosotros nos encontramos, mirando con esperanza al futuro, porque el presente no responde a esta realidad y porque en nuestro mundo se dan fracturas y divisiones”.
Igualmente, D. Juan Francisco subrayó la necesidad de que todos los hombres, independientemente de su raza, de su cultura o de su religión, nos unamos para trabajar por un mundo mejor. “Todos tenemos que sentirnos miembros de un mismo cuerpo. Todos aquellos que trabajamos por la causa del hombre tenemos que unir nuestros corazones y trabajar al unísono. Por eso, esta celebración es un manifiesto de esperanza y es un signo visible de que en nuestra comunidad cristiana queremos llevar a la práctica el mandato de Jesús. Convertir realmente nuestro corazón con obras auténticas, visibles”.
El encuentro destacó por su ambiente festivo y por la participación activa de los inmigrantes. Asimismo, los diversos idiomas y la simbología de las culturas allí presentes, hicieron patente la universalidad de la ceremonia. Tras la Eucaristía, tuvo lugar un aperitivo fraternal en el que los asistentes pudieron seguir compartiendo y degustar comidas típicas de todos los países.
La Jornada Mundial del Emigrante y Refugiado se ha celebrado en toda la Iglesia bajo el lema “Nueva Evangelización y Migraciones”. “El momento actual llama a la Iglesia a emprender una nueva evangelización también en el vasto y complejo fenómeno de la movilidad humana, intensificando la acción misionera, tanto en las regiones de primer anuncio como en los países de tradición”, asegura Benedicto XVI en su mensaje para esta jornada.
"El actual fenómeno migratorio es también una oportunidad providencial para el anuncio del Evangelio en el mundo contemporáneo. Hombres y mujeres provenientes de diversas regiones de la tierra, que aún no han encontrado a Jesucristo o lo conocen solamente de modo parcial, piden ser acogidos en países de antigua tradición cristiana. Es necesario encontrar modalidades adecuadas para ellos, a fin de que puedan encontrar la salvación, «fuente de vida abundantes» para todos” afirmaba Benedicto XVI.
Las celebraciones relacionadas con la pastoral de los inmigrantes han sido organizadas por el Secretariado Diocesano del Obispado de Jaén, que dirige la religiosa Anunciación Esteve.