Bajo la dirección del maestro Martín Morales Lozano, la
Coral y Orquesta Sinfónica Baezanas interpretaron ayer magistralmente el
Miserere que Hilarión Eslava compusiera por encargo para la Catedral de
Baeza y que sin duda ocupa un lugar destacado en la noche del Martes
Santo en la ciudad. Además, este año se cumple el 150 años.

Ante una Catedral repleta, con un aforo sentado de 960
personas, la Coral compuesta, por más de 100 voces mixtas, dio vida al
salmo 50, salmo penitencial por excelencia atribuido al rey David, obra
que cada año vuelve a resonar entre las bellas bóvedas del templo
catedralicio, creando la misma expectación que si fuera la primera vez
que se interpretara.

El Miserere consta de 12 versículos, 6 de ellos
interpretados por el coro y el resto por solistas. Este año el “Amplius”
lo ha interpretado la tiple Pilar Martínez, que sustituyó a ultima hora
a Pilar Gómez por afonía. El solo del “Ecce enim” para contralto lo
ejecutó Mónica Ruiz; el “Cormundum” corrió a cargo de Pilar Martínez; al
“Redde mihi”, que es un dúo para tiple y contralto, le pusieron voz
Mónica Ruiz y Rafael Cejudo, y, por último, los solos “libera me” fueron
interpretados por Francisco Parrilla y, el “Benigne, por Carmen Sánchez
y David Ruiz.

Como es habitual, asistió la Corporación Municipal casi
al completo, con el alcalde a la cabeza, junto a numerosas autoridades
civiles y eclesiásticas, ademas de una nutrida representación de
Burlada, (Navarra), localidad natal del compositor y hermanada con
Baeza.

El público disfrutó y premió esta brillante actuación de
la coral y orquesta sinfónica con amplios y generosos aplausos,
poniéndose fin a la interpretación con el tradicional “Himno a Baeza”
que fue coreado por todos los asistentes.