Se sabe que es de bien nacidos ser agradecidos, y la cena benéfica que la Cofradía de la Virgen de la Capilla organizó en la plaza de toros tuvo un momento entrañable cuando los niños huérfanos acogidos en el orfanato que la cofradía ha construido en el Congo dieron las gracias en español a sus benefactores jiennenses.
El artífice de la proeza es el misionero español de los Padres Blancos, Francisco Ostos Palma, quien grabó un vídeo para mostrar a los comensales que el orfanato construido en la misión del Logo de la Diócesis de Mahagi, en la conflictiva región de Ituri de la República del Congo, es ya una realidad.
El orfanato, explica el padre Ostos, está dirigido por las Hermanas Siervas de Jesús y lleva por nombre “Virgen de la Capilla”, en honor de la patrona de Jaén.
En la actualidad, acoge a 27 niños de muy corta edad, pero su capacidad es para 50. “En el Congo no existe el estatus de huérfano, porque allí son familias muy grandes y cuando a un niño se le mueren sus padres se hacen cargo de él sus abuelos, tíos o primos. Pero estos niños no tienen familia. Como es una zona en conflicto, aunque hay algunas áreas pacificadas muchas mujeres, que tienen que abandonar sus poblados para huir del conflicto, son violadas y se quedan embarazadas, algunas mueren durante el parto y nadie conoce a sus familiares ni quién es el padre, por lo que nadie sabe de sus hijos ni los reclama”, manifiesta el misionero.
Un proyecto que la cofradía ha llevado a cabo y que ha tenido una grata respuesta por parte de cofrades y personas en general que asistieron a la mencionada cena.