La cofradía de la Expiración, la cual debería haber empezado a hacer su estación de penitencia en torno a las siete de la tarde, tampoco salió finalmente a la calle, en ésta fatidica tarde de Jueves Santo.
La cofradía, con su hermano mayor al frente, se reunió para tomar una decisión que no ha sido nada fácil pero que era necesaria para el patrimonio de la propia hermandad, ya que, aunque la estación de penitencia es el culmen de un año cofrade, se trabaja durante los 365 días.
Ante una iglesia de San Bartolomé abarrotada, se dió la nefasta noticia, ya que, consultando los pronósticos, todos daban pocas posibilidades de que hubiera claros en el cielo. Como consecuencia, la hermandad seguirá trabajando para el próximo año poder hacer estación de penitencia por las calles de la ciudad.
Pues sí que ha sido una triste tarde para todos los cofrades expiracionistas. Aunque ya se preveía desde hace varios días que la tarde de este Jueves Santo se complicase, nadie se hacía a la idea de que la Hermandad nos saliese a las calles de Jaén. Más aún cuando este año se cumplían 30 años de la salida de su imagen titular, el Santísimo Cristo de la Expiración, a hombros de sus costaleros, varios de los cuales aún la continúan portando.
A sido una pena