Pocas parroquias pueden presumir en Jaén de ser cuna de tantas hermandades como lo ha sido la de San Eufrasio. En esta pequeña iglesia del barrio de la Alcantarilla se refundó la Estrella o germinaron la Santa Cena y Caridad y Salud. Más recientemente, dos grupos parroquiales se forjaron entre sus muros de piedra encalados, la Sagrada Lanzada, que ahora sigue su camino en San Pedro Pascual, y la Sentencia, que permanece creciendo a diario a la par que lo hace la devoción que despiertan Nuestro Padre Jesús de la Sentencia y María Santísima de la Encarnación.
Esta Cuaresma ha sido la primera en la que las Sagradas Imágenes conviven, de ahí el carácter histórico del Triduo celebrado los días 25, 26 y 27 de febrero. A pesar de las limitaciones, debido a la crisis sanitaria del Covid-19, fue grande el arropo de los fieles y feligreses sorprendidos por el maravilloso altar elevado en el presbiterio.
Las Eucaristías fueron oficiadas en primer lugar por el Rvdo. D. Alfonso Medina, el segundo día por el Rvdo. D. Rogelio de Jesús Garrido (Ecónomo de la Diócesis de Jaén, Canónigo de la Santa Iglesia Catedral de Jaén y Párroco de la Parroquia de San Eufrasio) y el tercer día por el Rvdo. D. Emilio Samaniego (Canónigo de la Santa Iglesia Catedral de Jaén).
Como broche de oro al Solemne Triduo donde la oración fue el eje central, el día 28 de febrero, Día de Andalucía, tuvo lugar la Solemne Función Principal en una abarrotada Parroquia que se quedó pequeña para los hermanos, feligreses y devotos congregados.
En esta jornada la celebración fue a cargo del presidente del grupo parroquial, el Rvdo. D. Rogelio de Jesús Garrido. “La ilusión y la satisfacción eran las protagonistas en los rostros de los nuevos hermanos de La Sentencia, que dieron pública protestación de fe y promesa del cumplimiento de nuestras reglas, lo que es un gran orgullo y satisfacción en el seno del Grupo Parroquial”, recuerdan en su crónica los hermanos de Sentencia y Encarnación.
Para esta ocasión, el Señor de la Sentencia ha estrenado un broche de oro donado por un hermano. Además el equipo de priostía ha completado la primera fase del altar de cultos.
Fotografías: Pedro Oya