Muy especial ha sido para los hermanos del Gran Poder celebrar este año el Triduo en honor a sus Sagrados Titulares en una Cuaresma de intenso trabajo. Por primera vez, lo han hecho como hermandad, con todo lo que esto supone de ilusión, nervios y deseos. En la parroquia de la Santa Cruz hemos podido disfrutar de un altar de cultos peculiar, con Jesús del Gran Poder y María Santísima del Dulce Nombre cogidos casi de la mano, avance de un encuentro que veremos en el paso de misterio de la Madrugada del Viernes Santo. Tras ellos, San Juan y Santa María Magdalena, con la Cruz presidiendo el altar.
Fotografías: José M. Anguita