Durante todo el mes de mayo, Jaén ha ofrecido sus flores a la Virgen de la Capilla y con el cambio de mes, ha tenido lugar la tradicional Novena en honor de Nuestra Señora. Nueve días de oración conjunta para rendir culto a quien visitó esta ciudad allá por 1430. Mucho ha llovido desde entonces, pero los jiennenses mantienen la devoción, el cariño y la gratitud a la Madre que vino a socorrerlos. Entonces en tiempos de guerra, ahora, en tiempos de dificultad.
La Novena ha sido la antesala de un fin de semana que nos traerá de nuevo a la Imagen de la Virgen de la Capilla para bendecir con su presencia al pueblo que le grita vivas.
Fotografías: Manuel J. Quesada Titos